El dolor de espalda es una de las principales razones por las que las personas comienzan a perder movilidad en la mediana edad. El dolor puede alejar a la gente de la actividad física, por lo que es más difícil para ellos mantener un peso saludable y mantener su fuerza, resistencia y equilibrio a medida que envejecen. Así que el tratamiento y el manejo del dolor que resulta de lesiones y otros problemas de salud es crucial para mantenerse en el camino de una vida sana y activa.
La importancia del colchón
Teniendo en cuenta que la mayoría de la gente pasa más o menos un tercio de su vida en la cama, elegir el colchón adecuado es esencial para el manejo del dolor lumbar. Lo primero que hay que valorar es si se puede dormir por la noche y funcionar normalmente al día siguiente.
Colchón duro
En el pasado, los médicos a menudo recomendaban colchones muy duros. Pero una encuesta de 268 personas con dolor de espalda encontró que los que dormían en colchones ortopédicos (muy duros) tenían la peor calidad del sueño. No hubo diferencias en la calidad del sueño entre los que utilizaron colchones de dureza mediana.
Colchón blando
Colchones muy blandos, por otro lado, también puede ser problemáticos. Mientras que un colchón suave que se ajusta a las curvas naturales de su cuerpo puede ayudar ya que las articulaciones se alinean de manera favorable, también puede hundirse tan profundamente que las articulaciones tienen una excesiva torsión y se vuelven dolorosas durante la noche.
Si quiere saber si un colchón más firme te haría sentir mejor que el que está utilizando actualmente, trate de poner un tablero de madera contrachapada debajo del colchón para amortiguar el movimiento del somier, o haga la prueba de colocar su colchón en el suelo.
El colchón ideal
Si tienes dolor lumbar, es importante que tengas en cuenta estos consejos para asegurarte de que tu colchón no empeora tu dolor:
Espuma viscoelástica o Espuma de látex: Los colchones de espuma viscoelástica (también conocida como memoria) o de látex son buenas opciones para las personas con dolor lumbar. Estos materiales se adaptan al contorno del cuerpo, proporcionando un soporte personalizado y aliviando los puntos de presión.
Soporte Firme pero Cómodo: Un colchón de firmeza media a firme suele ser mejor para las personas con dolor lumbar. Proporciona el soporte necesario para mantener la columna vertebral alineada, pero aún así es lo suficientemente cómodo para dormir.
Buena Distribución del Peso: Un colchón que distribuye uniformemente el peso del cuerpo puede ayudar a reducir la presión sobre la columna vertebral y, por lo tanto, aliviar el dolor lumbar.
Durabilidad: Busca un colchón que sea duradero y mantenga su forma con el tiempo para asegurar un soporte continuo para tu espalda.
Prueba del Colchón: Antes de comprar, si es posible, prueba el colchón. Muchas tiendas permiten que los clientes se acuesten en los colchones para evaluar su comodidad y soporte.
Garantía y Política de Devolución: Asegúrate de entender la garantía del colchón y la política de devolución en caso de que no estés satisfecho después de usarlo durante un tiempo.
Es importante consultar a un médico o un especialista en salud de la espalda para obtener recomendaciones específicas según tu condición. Cada persona es única y lo que funciona para uno puede no ser adecuado para otro en términos de alivio del dolor lumbar.
Dr. Miguel Ángel Fernández Torán - Director Médico del Balneario de Cofrentes